Sugerencias

 


Notas:

  • La característica principal de la Red Asís es que quiere ser abierta, ofrecerse y multiplicarse. Esa apertura nos corresponde facilitarla a cada una de las personas que formamos parte de la red. Todos/as podemos ser multiplicadores de la Red Asís pensando a quién podemos invitar a inscribirse para recibir esta Carta o acudir a la oración mensual que se celebra los últimos jueves de cada mes a las 19.30 h, en los lugares habituales.
  • Si quieres recibir información sobre la Red Asís o inscribirte para recibir mensualmente esta carta, llama al 646-214896 o envía un mail a redasis@arantzazu.org.

 

Enero de 2020  Número 135

Principio 3. Vida cotidiana: Hacia fuera, solidaridad

El papa Francisco ha querido despertar y exhortar a l@s cristian@s a hacernos conscientes de que el respeto a Dios pasa por responsabilizarnos de su creación. Y para ello se ha servido del cántico de Francisco de Asís: “Laudato si”.

Cuidemos la creación, cuidemos lo que con tanto amor ha hecho Dios.

Tema de reflexión

Consumo responsable

Nuestros hábitos de consumo han ido variando constantemente en pocos años. De comprar únicamente lo estrictamente necesario, hemos pasado a comprar para saciar nuestras necesidades creadas por la publicidad, o como terapia contra la depresión, o a entender como actividad puramente económica, etc. Y sin embargo, estamos entrando en una fase –hace tiempo que nos lo estaban diciendo algunos— donde el modo de consumo apela a nuestra responsabilidad con la Tierra, nuestro hogar. Lo que consumimos y cómo lo hacemos no es cuestión sólo del ámbito personal; es más bien cuestión de solidaridad con la humanidad toda. Nuestro tren de vida está cambiando –ya lo ha cambiado de hecho—el ciclo natural de nuestro planeta.

Esta responsabilidad en el consumo corresponde a toda la humanidad, pero sobre todo a nosotros, la parte de la humanidad que más recursos y energía gasta dado el tren de vida que llevamos. Tenemos que reconocer, aunque nos cueste aceptarlo, que es inviable un modo de vida como el nuestro para toda la humanidad. Dicen los entendidos que se necesitarían dos planetas Tierra para poder llevarlo a cabo.

Nuestro consumo habla de nuestra solidaridad o insolidaridad con los demás seres humanos. No sólo con los actuales, sino también con los que están por venir. Estamos llamados a seguir consumiendo para vivir, pero con responsabilidad. Ello supone controlar más nuestras necesidades –cuáles son verdaderas y cuáles no tanto--, pide informarse un poco más de lo que compramos --su origen, las condiciones de trabajo de las personas que lo elaboran, el desgaste real sobre la naturaleza-- y conlleva mejorar el tratamiento que damos a lo que desechamos.

Más que comprar menos, es saber qué y para qué se compra porque ya no es solo de un acto individual que habla de mí, sino que es un acto que habla también de lo que quiero y hago por los demás; sobre todo por los que menos tienen y por los que vendrán en el futuro.

Texto bíblico: 1Tm 6,6-9.11

La religión es ciertamente de gran provecho, cuando uno se contenta con lo necesario, pues nada hemos traído al mundo y nada podremos llevarnos de él. Hemos de contentarnos con tener alimento y vestido. Los que quieren enriquecerse caen en trampas y tentaciones, y se dejan dominar por muchos deseos insensatos y funestos, que hunden a los hombres en la ruina y en la perdición. Pero tú, hombre de Dios, evita todo esto, practica la justicia, la piedad, la fe, la caridad, la mansedumbre”.

Espiritualidad franciscana

Y«Nada reclamaban como propio. Los libros y demás objetos que les habían sido dados, los usaban según la forma transmitida y observada por los apóstoles: “Nadie consideraba propio nada de lo que poseía, sino que tenían en común todas las cosas”. A la par que en ellos y entre ellos reinaba una verdadera pobreza, eran liberales y generosos con todo lo que les había sido entregado por Dios, y por su amor daban de buena gana a cuantos se las pedían, y particularmente a los pobres, las limosnas que ellos habían recibido. Cuando iban de camino y se encontraban con pobres que les pedían algo por amor de Dios, si no llevaban ninguna otra cosa que darles, les entregaban parte de sus vestidos, aunque viles, en cumplimiento de lo que dice el Evangelio: A todo el que te pide, dale (Lc 6,30).

Se gozaban cordialmente en la pobreza, pues no ambicionaban riquezas, sino que despreciaban todo lo caduco que pueden codiciar los amantes de este mundo. Se alegraban de continuo en el Señor y no encontraban entre sí ni dentro de sí motivo de tristeza. Cuanto más apartados de la codicia del mundo, tanto más unidos estaban con Dios, caminando siempre por la senda del Evangelio» (cf. TC 43.45).

Oración

Dios omnipotente,
que estás presente en todo el universo
y en la más pequeña de tus criaturas,
Tú, que rodeas con tu ternura todo lo que existe, derrama en nosotros la fuerza de tu amor
para que cuidemos la vida y la belleza.
Inúndanos de paz,
para que vivamos como hermanos y hermanas sin dañar a nadie.
Dios de los pobres, ayúdanos a rescatar
a los abandonados y olvidados de esta tierra
que tanto valen a tus ojos.
Sana nuestras vidas,
para que seamos protectores del mundo
y no depredadores,
para que sembremos hermosura
y no contaminación y destrucción.
Toca los corazones
de los que buscan sólo beneficios
a costa de los pobres y de la tierra.
Enséñanos a descubrir el valor de cada cosa,
a contemplar admirados,
a reconocer que estamos
profundamente unidos con todas las criaturas
en nuestro camino hacia tu luz infinita.
Gracias porque estás con nosotros
todos los días.
Aliéntanos, por favor, en nuestra lucha
por la justicia, el amor y la paz.

Epílogo de la Carta

“Vivimos en este planeta como si tuviésemos otro al que ir”. (Terri Swearingen)

Evangelio diario del mes de enero de 2019

Las personas que deseen hacer una lectura diaria del Evangelio, según las lecturas que corresponden cada día, tienen a continuación las referencias de todo el mes de enero:

1 Lc 2, 16-21 / 2 Jn 1, 19-28 / 3.Jn 1, 29-34 / 4 Jn 1, 35-42 / 5 Jn 1, 1-5.9-14 / 6 Mt 2,1-12 / 7 Mt 4,12-17.23-25 / 8 Mc 6, 34-44 / 9 Mc 6, 45-52 / 10 Lc 4, 14-22 / 11 Lc 5, 12-16 / 12 Mt 3,13-17 / 13 Mc 1, 14-20 / 14 Mc 1, 21-28 / 15 Mc 1, 29-39 / 16 Mc 1, 40-45 / 17 Mc 2, 1-12 / 18 Mc 2, 13-17 / 19 Jn 1, 29-34 / 20 Mc 2, 18-22 / 21 Mc 2, 23-28 / 22 Mc 3, 1-6 / 23 Mc 3, 7-12 / 24 Mc 16, 15-18 / 25 Mc 3, 20-21 / 26 Mt 4,12-23 / 27 Mc 3,22-30 / 28 Mc 3, 31-35 / 29 Mc 4, 1-20 / 30 Mc 4, 21-25 / 31 Mc 4,26-34

La oración del mes de enero será el día 30